Me hizo mucha ilusión volver a hacer fotos con Massimo Dutti. Esta vez vino mi padre y también lo pasamos muy bien. Cuando llegamos conocimos a Paola y fuimos a cenar con ella y con una niña de Valladolid. Jugamos al billar. Yo me divertí mucho.

Descansamos muy bien y al día siguiente fuimos a las antiguas oficinas de Massimo Dutti. Allí nos esperaba todo el equipo, que se acordaba de mí. Conocí a otra niña de Barcelona. Fue muy divertido porque… ¡habían preparado arena de playa para las fotos! y jugamos los tres como si estuviéramos de vacaciones.

Todos nos atendieron fenomenal y he vuelto a disfrutar mucho de este día.

¡Gracias a todos!.

Un Sugar Boy.